(…)A mi el dinero no me importaba, solo lo quería a el, pero lo trágico es que poco a poco fui dándome cuenta de que estaba perdiendo porque no quería luchar, quería que el me amara por si mismo, no porque yo lo indujera con mis mañas. La esposa era lista y uso toda clase de tácticas contra mí. Incluso la vi. un par de veces. Vino a visitarme, a hablar conmigo; a decir que iba a destruirnos. Pero yo era muy fuerte, porque no me importaba. De todos modos no tenia nada que pudiera arrebatarme. Ahora tengo treinta y dos años, y cuando llegas a esta edad descubres…
- ¿Descubrir que? ¿Qué has descubierto?
- Siempre importaba ser más o menos como los demás y me preocupaba lo que pensaran de mí.
Ahora se que soy diferente. Quiero ser yo misma; quiero alguien que yo ame y que me corresponda…
Nuevo Premio Principe de Asturias de las Artes y las Letras.