Cuentan que cuando D’s creó el mundo envió a dos ángeles para que repartieran la sabiduría y la estupidez por todo el mundo recién creado, y que cuando el ángel que llevaba el saco de la estupidez voló cruzando las montañas que rodeaban a la pequeña aldea Khelm tropezó con las montañas y más de la mitad del contenido del saco cayó sobre la pequeña aldea.
Los habitantes de la aldea de Khelm no es que sean estúpidos o tontos, simplemente están un poco locos. Y una vez de cada mil, aciertan.
tomado de "Cuentos del pueblo judío" Ben Zimet
No comments:
Post a Comment